El saltador cubano, Juan Miguel Echevarría, de 20 años, logro un excepcional registro de 8.92 metros con viento ilegal de 3,3 m/s, en la final del salto de longitud, de la Copa Cuba de Atletismo que acogió la pista auxiliar del Estadio Panamericano, de esta capital.
El registro, del ganador del Campeonato Mundial bajo techo en Birmingham del 2018, es la quinta mejor marca de la historia en cualquier condición y supera el salto más famoso de todos los tiempos de Bob Beamon (8,90 en los Juegos de México’68), pero no será homologada porque el límite legal está fijado en 2,0 m/s.
El estadounidense Mike Powell sigue teniendo el récord mundial oficial (8,95 m en el Mundial de Tokio’91) y también el mejor salto de todos los tiempos (8,99 m), logrado en 1992 en Sestriere con viento ilegal de 4,4 m/s. Esa localidad alpina está a 2.035 metros sobre el nivel del mar, una altitud que contribuye a conseguir buenas marcas.
El cubano Iván Pedroso (8,96) y el propio Powell (8,95) han conseguido los otros saltos más largos de todos los tiempos, pero tampoco figuran en las listas oficiales.
Sobre el excelente desempeño de su pupilo, el entrenador Daniel Osorio, quien a su vez es el jefe técnico de la Comisión Nacional de Atletismo de Cuba, declaró a la prensa, muy emocionado, que no esperaban un resultado tan extraordinario; lo previsto era saltar entre 8,40 y 8,50 metros, expresó.
Ha llegado a esta competencia en muy buena forma y sabía que podía lograr un registro grande, pero no imaginé que sería de 8,92 m, lo que sin dudas es impresionante sin importar el aire favorable, afirmó.
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