Eliud Kipchoge, demostrando ser el mejor del mundo en los 42k, se impuso por cuarta vez en el Maratón de Londres con la segunda mejor marca de la historia (2:02:37), solo superada por el récord del mundo que él mismo firmó en Berlín el año pasado (2:01:39).
El keniata, que con este triunfo suma 11 victorias en 12 maratones disputados, encontró bastante oposición en el etíope Mosinet Geremew, que con 02:02:55 firmó la tercera mejor marca de la historia. El podio lo completó el también etíope Mule Wasihun con otro buen registro (2h03:16) que le sitúa séptimo en la lista de todos los tiempos.
El ídolo local, Mo Farah, se descolgó de la cabeza poco después del paso de los 21k de la prueba y terminó quinto con un buen registro (2h05:39).
Kipchoge, sin duda alguna el mejor maratonista de la historia, manejó la carrera a su antojo, dando su habitual “jalón” poco antes del kilómetro 40, cuando aún corría en compañía de otros tres atletas
En la prueba femenina, el triunfo de Brigid Kosgei fue inapelable. La fondista keniana, segunda en Londres el año pasado y ganadora en Chicago, rompió la carrera poco después del kilómetro 25, encontrando la única oposición de su compatriota Vivian Cheruiyot, defensora del título. La otra gran aspirante, Mary Keitany, tricampeona en las calles de la capital británica, volvía a pinchar como el año pasado y se quedaba rezagada en compañía de Roza Dereje y Gladys Cherono.
Al final, triunfo claro de Kosgei con un registro, 2:18:20, que supone marca personal y la sitúa séptima en la lista de todos los tiempos, superando precisamente a Cheruiyot, segunda con un crono de 2:20:14. El podio lo completó la etíope Dereje con 2:20:51, por delante de Cherono (2:20:52) y Keitany (2:20:58), que repitió su decepcionante quinto puesto de 2018.
