Fue la última serie de los 100 metros, pero resultó la más impresionante. Los primeros Mundiales sin Usain Bolt en la pista dejaron una gran actuación de Christian Coleman, el atleta estadounidense que se erige como gran favorito al título mundial de los 100m.
El velocista de Atlanta fue el único que bajó de los 10 segundos (9.98) entre los 45 que participaron en la primera ronda, que no se cobró ninguna víctima relevante.
Su compatriota Justin Gatlin, que defiende en Doha su corona con 37 años -catorce más que Coleman- acreditó el tercer mejor tiempo al ganar la segunda serie con 10.06. La segunda plaza del sumario fue para el sudafricano Akani Simbine, vencedor de la primera carrera con un crono de 10.01.
Del Estadio Khalifa habrá de salir un campeón mucho más joven, llamado a dominar el esprint durante algunos años, y Christian Coleman, de 23, es el mejor colocado.
Todavía con el susto en el cuerpo tras escapar, por un tecnicismo legal, a una sanción de dos años por no justificar tres faltas a controles de dopaje por sorpresa en el plazo de doce meses, Coleman se presentaba en Doha como el más veloz del mundo los dos últimos años y al frente del ránking esta temporada con 9″81.
Sobre la pista de Doha, que recupera el rojo clásico de Beijing y Londres después de los azules de Berlín, Daegú y Moscú, el velocista de Atlanta se dejó llevar en los últimos metros, y aun así bajó de los 10 segundos.
También ganó una serie el campeón mundial de 2011, el jamaicano Yohan Blake con 10″07.