La novedad sacudió al mundo del deporte, particularmente al atletismo. Tras dos años dedicado al maratón, la estrella británica Mo Farah, cuatro veces campeón olímpico y seis veces campeón mundial (5.000 y 10.000 metros), anunció su regreso a la pista, con el objetivo de competir en los 10.000 metros de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. «La gran noticia es que estoy de vuelta en la pista. Espero no haber perdido mi velocidad, estoy entrenando duro para ello, a ver qué puedo hacer», declaró el corredor de 36 años en un vídeo publicado en Youtube.
Tras un último título mundial en Londres 2017 en 10.000 metros, Farah decidió dedicarse a las carreras de ruta. En 2018 se impuso en el maratón de Chicago, logrando el récord de Europa (2h05min11s). «Ganar el Maratón de Chicago fue estupendo y terminar tercero en el de Londres estuvo bien. Esta experiencia ha sido una gran curva de aprendizaje para mí», añadió el atleta.
El anuncio de Farah llegó un día después de la apertura de una investigación por parte de la Federación Británica de Atletismo (UKA) a Alberto Salazar, su entrenador entre 2011 y 2017, suspendido a finales de septiembre por incitación al dopaje, por parte de la Agencia Antidopaje Estadounidense (Usada). «Como ya he dicho, no hay ninguna acusación contra mí, no he hecho nada mal. Las acusaciones, siendo claras, solo conciernen a Alberto Salazar», declaró Farah.
Con esto, Farah intentará retener los títulos conseguidos en Londres 2012 y Río 2016. En el anuncio de regreso no se hizo mención a los 5.000 metros (se disputarán seis días después que la competencia en 10.000), donde el británico también ha ganado dos oros olímpicos y tres mundiales.
Si el corredor lograse una tercera corona olímpica en los 10.000 metros sería el primer atleta en conseguirlo. En este sueño aparecen otros desafíos. Farah buscará convertirse en el más longevo en ganar el oro en los 10.000 metros, superando el registro del etíope Miruts Yifter, que en Moscú 1980 ganó los 5.000 y los 10.000 metros con 36 años.
No será sencillo el camino de Farah en los Juegos Olímpicos. Allí podría encontrarse con jóvenes promesas como el ugandés Joshua Cheptegei, de 23 años, el etíope Yomif Kejelcha, que estará a punto de cumplir 24, o el keniano Rhonex Kipruto, de 20. Pero el sueño del hombre de origen somalí ya está en marcha.