La clausura de los Juegos Paralímpicos Tokio 2020, fue una fiesta que celebró el esfuerzo, la entrega, la voluntad y la lucha diaria por seguir superándose así se puso punto final a 12 días de increíbles historias, récord batidos y emociones al límite. Pilar Jáuregui fue la encargada de llevar la bandera en el desfile de los países
Una de las emociones más importantes de estos Juegos Paralímpicos es como aquella que protagonizó Angélica Espinoza al ganar la medalla de oro en el Para taekwondo y lo hacía después de 21 años, siendo el ultimo el para atleta en gana el oro paralímpico de natación Jimmy Eulert en Sídney 2000.
Tokio 2020 le bajó el telón a los Juegos que marcaron la esperanza, en especial, en el último año y medio en el que la población mundial debió enfrentarse a un virus mortal.
Fue un cierre distinto, que comenzó con los Para atletas ya instalados en el centro del campo para dar paso, luego, al desfile de los 162 países presentes en el que la Para badmintonista Pilar Jáuregui fue la encargada de llevar la bandera del Perú.
“Durante este carnaval de deportes celebramos nuestras diferencias, exhibimos lo mejor a ls humanidad y mostramos nuestras diversidades. Pero el viaje no termina aquí. Esta noche no es una ceremonia de cierre, es el inicio de un futuro brillante e inclusivo”, señaló Andrew Parsons, presidente del Comité Paralímpico Internacional.
Un grupo de peruanos asistió a la ceremonia (los maratonistas Efraín Sotacuro y Carlos Sangama, quienes corrieron anoche -horario peruano- el maratón, se quedaron descansando en la Villa) y disfrutó hasta el final el espectáculo, recordando y agradeciendo el magnífico torneo que dejó, además de la medalla de oro, cinco diplomas paralímpicos.
