El entrenador estadounidense nacido en Cuba Alberto Salazar tendrá que abandonar el Mundial de Doha después de haber sido suspendido cuatro años por «incitación» al dopaje, confirmó la Federación Estadounidense de Atletismo (USATF).
En un comunicado que siguió al anuncio la suspensión de Salazar, la USATF dijo que se le retiran las credenciales para el Mundial en curso al técnico de 61 años, preparador en el pasado del británico Mo Farah.
«La USATF ha dado los
pasos necesarios para que la acreditación de Salazar para el Mundial de la IAAF
(Federación Internacional de Atletismo) sea desactivada», dijo la USATF en
un comunicado.
Alberto Salazar fue suspendido por «organización
e incitación a una conducta dopante prohibida», según indicó en un
comunicado el lunes la Agencia Antidopaje Estadounidense.
«El compromiso de la USATF está claro a favor de un deporte limpio»,
añadió. «La USATF está concentrada en la salud y el bienestar de sus
atletas», sentenció.
Alberto Salazar es el cerebro del
‘Oregon Project’, un grupo de entrenamiento de alto nivel con base en el
noroeste de Estados Unidos y financiado por la marca deportiva Nike.
Ese grupo ha cosechado importantísimos éxitos en el fondo y el medio fondo. En
el pasado, Salazar fue especialmente conocido como entrenador de Mo Farah,
cuatro veces oro olímpico y seis veces oro mundial entre los 5.000 y los 10.000
metros.
Farah, que prepara actualmente la defensa de su título en el maratón de Chicago
(13 de octubre), es uno de los grandes ausentes del Mundial de Doha. Varios atletas entrenados por Salazar están
presentes en el Mundial de Doha, como la holandesa nacida en Etiopía Sifan
Hassan, que se colgó la medalla de oro el sábado en los 10.000 metros. «Me
entristece mucho el momento que ha elegido la USADA para dar esta noticia, me
desestabiliza mucho, justo en víspera en comenzar mi participación en 1.500,
distancia que correré con toda mi energía. Llegué al grupo de todo esto, cuando
me uní al Nike Oregon Project sabía que estaba abierta esta
investigación», contaba la neerlandesa. Hassan tiene previsto correr en el
Mundial, los 1.500 o los 5.000 metros.
También los estadounidenses Clayton Murphy (bronce olímpico en 2016) y Donovan
Brazier, ambos clasificados para disputar hoy la final de 800 metros, son entrenador
por Salazar.
Mo Farah formó parte del grupo
entrenado por el técnico entre 2011 y 2017, junto a figuras como los
estadounidenses Galen Rupp (doble medallista olímpico) y Matthew Centrowitz (campeón
olímpico de 1.500 metros en Rio-2016).
El propio Salazar, estadounidense de 61 años, emitió un comunicado con su versión de los hechos: «Me encuentro sorprendido.Durante esta investigación de la USADA mis atletas han sido sometidos a métodos poco éticos. Nunca he permitido el dopaje. Apelaré».