En la presente entrega de los Atletas Olímpicos (83) se incluye, a la austriaca Bauma, primera campeona en la jabalina; la letona Jaunzeme, otra que inicio las conquistas soviéticas; la chilena Ahrens, hasta el presente, única medallista olímpica del atletismo chileno; la rumana Penes, sorprendente ganadora en Tokio; la húngara Németh y su épica remontada en México; la alemana Fuchs, ama de la jabalina en los 70 y la cubana Romero, primera criolla en la élite del disco.
Bauma; titular olímpica luego de la guerra
La austriaca Herma Bauma fue la primera campeona olímpica en el lanzamiento de la jabalina de la postguerra. Hermine “Herma” Bauma, nació en Viena, el 23 de enero de 1915. Tuvo dos experiencias olímpicas, la primera en Londres 1948, donde se coronó con envío de 45.57, en la segunda, terminó novena en Helsinki 1952 (42.54). En sus archivos acumula, la medalla de plata en el europeo de Bruselas 1950 y dos récords mundiales 48.21 (1947) y 48.63 (1948). Bauma, también destacó como jugadora de balonmano.
Jauzeme; primera de dos titulares soviética en jabalina
La letona Inese Jaunzeme es una de las dos jabalinistas que conquistaron el título olímpico representando a la Unión Soviética. Jaunzeme había nacido en Plavinas, Letonia, el 21 de mayo de 1932. El triunfo aconteció en Melbourne 1956 donde, la entonces soviética se impuso con 53.86, luego en Roma 1960, lo haría Elvira Ozolina. Jauzeme no logró destacar posteriormente, en 1967 lanzó 53.36 y en 1960 logró marca personal de 55.73, quinta en el listado mundial y segunda soviética, tras Ozolina, pero a la capital italiana viajaron Ozolina (1), Birute Kalédiené (3) y Alevtina Sehastitkp (8). Jaunzeme laboró como entrenadora en la sesión de atletismo del Club Dinamo de Riga.
Ahrens; única chilena con una presea olímpica
La chilena Marlene Ahrens es la única atleta de su país con una medalla en el atletismo olímpico. Ahrens Ostertag, había nacido en Concepción, el 27 de julio de 1933. Su desempeño olímpico es digno de elogios, aconteció en Melbourne 1956, Ahrens era, quizás, la menos conocida y también la de menores opciones a ocupar un puesto en el podio, hasta la cuarta ronda, las europeas ocupaban las posiciones de vanguardia, con la soviética Inese Jaunzeme (53.40), primera, seguida de su paisana Nadezhda Konyayeva (50.28), la checa Dana Zátopková (49.83) y la sueca Ingrid Almqvist (49.74), mientras Ahrens estaba ubicada en el quinto puesto, con 49.36, pero la chilena descargó la potencia de su brazo durante su quinto intento, logrando un envío de 50.38 metros, que la llevaron al segundo puesto, medalla de plata, constituyendo toda una hazaña, era la abanderada y única mujer en la comitiva austral en Melbourne. Estuvo presente en Roma 1960, pero no pudo pasar del duodécimo puesto, con 47.53. Retirada del atletismo, incursionó en el tenis, conquistando el nacional en dobles mixtos, junto a Omar Pabst, en 1967. Con 62 años, representó a Chile en las competencias ecuestres de los Juegos Panamericanos de Mar de Plata 1995.
Penes; sorprendió en Tokio 1964
La rumana Mihaela Penes posee las únicas medallas olímpicas de su país, en el lanzamiento de la jabalina. Penes es natural de Bucarest, donde nació, el 22 de julio de 1947. Con 17 años se impuso, quizás, inesperadamente en los Juegos Olímpicos de Tokio 1964, pues estaban presentes la mítica Elvira Ozolina y su paisana Elena Gorchakova, quien se había gastado un récord mundial en la ronda clasificatoria (62.40), pero la rumana, que había accedido a la final, con la sexta mejor marca (51.19), envió la jabalina hasta los 60.54 metros en la ronda inicial, válidos para el título, la húngara Marta Rudas (58.27) fue segunda, mientras Gorchakova (57.06), era tercera. Cuatro años más tarde, en México, cedió el trono (59.92) ante la húngara Angela Németh (60.36). Penes sumó medalla de plata en el europeo de Budapest 1966.
Németh; primera titular húngara en jabalina
La húngara Angela Németh es la única ganadora de un título olímpico, para su país, en el lanzamiento de la jabalina. Németh, conocida posteriormente como Angela Ránky (por su matrimonio), había nacido en Budapest, el 18 de febrero de 1946. Ránky-Németh tuvo dos experiencias olímpicas, en la primera de ellas, en México 1968, donde se consagró titular olímpica, para ello, debió remontar con 60.36 a la rumana Mihaela Penes (59.92), ganadora en Tokio 1964; mientras que, en su segunda cita olímpica, Münich 1972, resultó eliminada, con 53.48. Németh sumó al título olímpico, el europeo en Atenas 1969.
Fuchs; dueña y señora de la jabalina en los 70s
La alemana Ruth Fuchs dominó el lanzamiento de la jabalina durante los años 70s. Fuchs es natural de Egeln (Sajonia-Anhalt), donde nació, el 14 de diciembre de 1946. Se inició en el Club Motor Jena. La primera aparición de Fuchs entre la élite de la jabalina, acontece en 1967, cuando se ubica séptima (56.08) en el listado anual. En 1970 supera los 60.00, con envío de 60.60, era el inicio de su meteórica progresión hacia la cúspide de la especialidad. En Münich 1972, vive su primera experiencia olímpica, de las tres que tuvo, venciendo con 63.88, triunfo que reeditó en Montreal 1976, ahora con 65.94, mientras que la despedida tiene lugar en Moscú 1980, octavo puesto (63.94). En su currículo aparecen dos títulos europeos (Roma 1974 y Praga 1978) y otro par en Copas del Mundo (Dusseldorf 1977 y Montreal 1976), así como seis cuotas mundiales, la última de ellas, cercana a los 70.00, con 69.96, impuesto en Split, el 29 de abril de 1980. Posterior al retiro, Ruth Fuchs se dedicó a la política, llegando a ser miembro del Parlamento, por el Partido del Socialismo Democrático, luego de la reunificación alemana.
Romero; dos veces olímpica y tres títulos continentales
La cubana Carmen Romero marcó una época en el lanzamiento del disco en Cuba. Romero nació en Santiago de Cuba, el 6 de octubre de 1954. Su inclusión en la élite mundial de la prueba acontece en 1975, cuando logra un envío de 66.20, que la ubicó quinta en el listado de esa temporada. En el año olímpico, la cubana consiguió marca de 69.08 (La Habana, 17 de abril), que la colocó segunda en el listado anual, solo superada por la soviética Faina Melnik, con 70.50 (récord mundial). Ese envío, en meses previos a la cita olímpica de Montreal, creó ciertas expectativas en torno a las medallas, confirmadas en la ronda clasificatoria, donde avanzó a la final con la tercera mejor marca (63.40), pero en la fase final, no pudo ir más allá de los 61.18, ubicándose novena. Una segunda oportunidad olímpica aconteció en Moscú 1980, a la, entonces capital soviética llegó Romero con 65.70, pero en la final, estuvo nuevamente alejada de su mejor registro de la temporada, quedando décima con 60.86. A nivel panamericano, conquistó tres títulos, Cali 1971, México 1975 y San Juan 1979; sumando dos en citas centrocaribeñas (Santo Domingo 1974 y Medellín 1978). En el ámbito nacional, implantó 18 cuotas nacionales.
Eddy Nápoles Cardoso – Cuba (Especial para Atletismo Peruano)