En la presente entrega de los Atletas Olímpicos (41), se incluyen, la entonces soviética Kondratieva, quien sorprendió a las alemanas en Moscú; su paisano Paklin, que no logró la gloria olímpica; el cubano Valle, dos veces finalista olímpico; el estadounidense Powell, la sombra olímpica de Carl Lewis; su coterráneo Johnson, el rey de los 90s; el polaco Partyka, a las espaldas de Javier Sotomayor y el peruano Castillo, olímpico en Barcelona y laureado en Sudamérica.
Kondratieva, sorprendió compitiendo en casa
La entonces soviética Liudmila Kondrátieva compitió en dos citas olímpicas, debiendo hacerlo en tres. Kondrátieva, nacida en Shajty (Öblast de Rostov), es la única mujer que se coronó titular olímpica en los 100 metros, compitiendo bajo la bandera de la hoz y el martillo. Liudmila Andréievna debutó internacionalmente en 1975 (17 años), con el cuarto puesto (200 metros) en los europeos junior de Atenas, pero se dio a conocer en 1978, al ganar el europeo absoluto de Praga, cuando venció a la alemana Marlies Göhr. Entre las asistentes, no era la favorita para ganar el título en Moscú 1980 (Göhr, Müller, Auerwald), pero supo aprovechar el momento, para vencer cerradamente (11.06) a Göhr (11.07). Ese año había logrado un 10.87, que no fue reconocido por la IAAF, por supuestas irregularidades. Aunque sus rendimientos disminuyeron, entre 1981 y 1983, en 1984 logró su mejor marca en los 100 metros, con 11.02, pero sufrió una obligada ausencia a Los Ángeles por el boicot soviético. Esto debió suponer la retirada del atletismo, mientras que contrajo nupcias con el martillista Yuri Sedyj. Tres años más tarde, regresa a las competiciones, asistiendo a sus segundos Juegos Olímpicos, Seúl 1988, donde es semifinalista (7) en 100 metros y medallista de bronce en la posta 4×100.
Paklin, recordista mundial sin gloria olímpica
Otros de los grandes saltadores de los 80s fue Igor Paklin, nacido en Frunze, Kirguistán, pero representó a la Unión Soviética. Quizás pudo estar en Los Ángeles 1984, temporada en la que había saltado 2.36, siendo su primera cita olímpica Seúl 1988, octavo puesto, mientras que en Barcelona 1992 resultó eliminado (2.20). En Campeonatos Mundiales, debutó con el quinto puesto en Helsinki 1983, logrando medalla de plata en Roma 1987, cerrando con el onceno puesto en Tokio 1991. Paklin ganó el mundial bajo techo de Indianapolis 1987 y es uno de los pocos saltadores (6) que han poseído el récord mundial, al aire libre (2.41, Kobe, 4 de septiembre de 1985) y bajo techo (2.36, Milán, 1° de febrero de 1984).
Valle, dos veces finalista olímpico
El cubano Emilio Valle formó parte de la continuidad de la tradición de vallistas cubanos, sucesor de Alejandro Casañas. Valle se dio a conocer internacionalmente en 1986, cuando gana el título mundial juvenil en Atenas, en 400 con vallas, pero, en la que sería su especialidad, logró bronce, los 110 con vallas. Valle tuvo dos participaciones olímpicas, siendo finalista en ambas, sexto en Barcelona 1992 y quinto en Atlanta 1996. En la parte final de su carrera deportiva, volvió a incursionar en los 400 con vallas, logrando el subtítulo en los Centrocaribes de Maracaibo.
Powell; a la sombra olímpica de Lewis
Del saltador de longitud estadounidense Mike Powell, pudiera expresarse, que permaneció la mayor parte de su carrera deportiva a la sombra de Carl Lewis, incluyendo, los tres Juegos Olímpicos en los que participó. Powell vio ganar a Lewis en Seúl 1988, Barcelona 1992 y Atlanta 1996, siendo segundo en los dos primeros y quinto en la despedida. Pero Powell le propinó un demoledor golpe a Lewis en el mundial de Tokio 1991, al vencerlo, luego de 10 años invicto (marzo, 1981) y hacerlo, con récord mundial de 8.95, algo que Lewis siempre persiguió. Los palmares de Powell se completan, con otro título mundial, Stuttgart 1993 y la presea de bronce en Götemburgo 1995. Su hazaña, la realizó en Tokio, cuando en dura porfía con Lewis (8.91w), logró batir los 8.90 de Bob Beamon, una cuota que estaba al borde de los 23 años de vida.
Johnson, una corona olímpica y cuatro mundiales
El vallista estadounidense Allen Johnson fue, entre 1995 y 2003, cuatro veces campeón mundial al aire libre, pero reinó a nivel olímpico en una oportunidad, Atlanta 1996, para Sydney 2000, aunque dominó esa temporada, no pudo evitar el triunfo del cubano Anier García, también lo adelantaron sus paisanos Terrence Trammell y Mark Crear; mientras que a Atenas 2004, llegó con el mejor tiempo entre todos los asistentes a esa prueba, 13.05, pero un tropezón en los cuartos de final lo dejaron fuera de la contienda, aunque la hubiera tenido difícil ante el chino Xiang Liu, ganador con 12.91. Sus títulos mundiales fueron en Gotemburgo 1995, Atenas 1997, Edmonton 2001 y París 2003, mientras que conquistó bronce en Helsinki 2005 y tuvo que abandonar por una lesión en Sevilla 1999. La extensa trayectoria de Allen Johnson, se puede ubicar entre, 1991 y 2010, con la particularidad, que la inició en salto de longitud (7.85).
Partyka, tras la sombra de Sotomayor
El polaco Artur Partyka, es otro de los saltadores de altura con dos preseas olímpicas en sus vitrinas. Siendo, quizás, el mejor escolta que tuvo el cubano Javier Sotomayor en su carrera deportiva. Partyka nacido en Stalowa Wola, Polonia, de padre argelino y madre polaca, tuvo un rápido ascenso a la élite mundial, a los 18 años saltó 2.23, terminando la etapa junior con 2.28. Sus aventuras olímpicas se iniciaron en Seúl 1988, a los 19 años, no pudiendo avanzar a la ronda final, pero en Barcelona 1992 se colgó al cuello la medalla de bronce, mejorando el color de la presea en Atlanta 1996. Partyka también archivó éxitos en campeonatos mundiales, iniciando por el título, entre los juniors, en Sudbury 1988, Sotomayor había ganado en Atenas 1986. En 1991 conquistó plata en el bajo techo de Sevilla y fue decimosegundo en Tokio, pero en Stuttgart 1993, escoltó en el podio al cubano Javier Sotomayor, mientras que en Gotemburgo 1995, volvió a secundar a Sotomayor, pero ahora en el tercer peldaño y en Atenas 1997, continuó a la saga del cubano (2).
Castillo; olímpico en Barcelona y laureado en Sudamérica
El peruano Juan José Castillo tuvo experiencia olímpica, esta aconteció en Barcelona 1992. Castillo (13 de marzo de 1968), es después de Roger Soler, el segundo fondista peruano participante en Juegos Olímpicos, en pruebas de fondo en pista. En la cita de Barcelona 1992, Castillo intervino en los 10 mil metros, siendo incluido en la semifinal dos, finalizando en el puesto 19°, con 30:04.60. Juan José, compitió en los Juegos Panamericanos de La Habana 1991, también en 10000 metros, pero no logró concluir la prueba. En citas Bolivarianas, en Cuenca 1985, ganó los 2000 con obstáculos, logrando bronce en 5000 metros y en Maracaibo 1989, triunfó en 5000 metros y 3000 con obstáculos. En los Juegos de la ODESUR, solo ganó la presea de bronce en Lima 1990 (10 mil metros).
Eddy Nápoles Cardoso – Cuba (Especial para Atletismo Peruano)