A sus 44 años, Bernard Lagat, el atleta de origen keniano y nacionalizado estadounidense que fue creciendo desde los 1.500, distancia donde fue campeón del mundo en Osaka en 2007 donde y también lo fue de 5.000, sigue desafiando las leyes humanas. Corrió en la madrugada la maratón de Gold Coast en Australia, cubriendo la distancia en 2.12:10, a sólo 40 segundos de la mínima olímpica.
Era su segunda maratón que corría en su vida después de haberlo hecho en Nueva York el pasado año en 2.17:20, donde descubrió la dureza del “muro”, el tramo a partir del kilómetro 30 cuando el ácido láctico está disparado y la fatiga machaca los músculos y la mente de los maratonianos.
«Mucha gente me advirtió sobre eso y me dijo que lo vigilara, pero nada me enseña que te guste vivir esa experiencia. Me asusté un poco y me pregunté si podía terminar», contó en la víspera. Lagat fue sétimo en la carrera manteniendo siempre un ritmo constante y nunca subiendo de 15:55 en los parciales cada 5 km. Incluso batió a Yuki Kawauchi (2.15:32), el atleta japonés que ya ha corrido 94 maratones en 10 años, 90 de ellos por debajo de 2.20.
El atleta estadounidense, que tiene todos los récords máster 40 en las distancias entre 1.500 y 5.000, demostró que tiene en sus piernas el récord mundial de mayores de 45 años que ostenta el keniata Kenneth Mungara (2.12:47), desde el maratón de Hong Kong en febrero pasado.
La prueba fue ganada por el japonés Yuta Shitara con 2.07:50, delante de Barnabas Kiptum (2.08:02).
