Más de 30 atletas rusos fueron declarados baja por enfermedad bruscamente y no participaron en sus pruebas cuando vieron llegar a los controladores de la Agencia Rusa Antidopaje (RUSADA) durante una competición regional en Siberia.
El sábado y el domingo, cuando se disputaban los campeonatos de atletismo de distrito federal de Siberia, 36 atletas renunciaron a correr después de la llegada de los controladores de la RUSADA, alegando que estaban enfermos o que renunciaban a participar, publicó el diario deportivo Championat.com.
Entre los atletas que renunciaron estuvo la especialista de 3.000 metros obstáculos Natalya Aristarkhova. Era la gran favorita de su carrera, después de haber elevado en diciembre su plusmarca personal a 9:06.01, lo que le hubiera colocado, en caso de homologacíón, en la décima mejor de todos los tiempos, ironiza Championat.com.
«La Comisión de Disciplina de la Federación Rusa de Atletismo ha iniciado una investigación interna», indicó la propia Federación en un comunicado, añadiendo que ha solicitado a los organizadores y a las federaciones regionales afectadas «informaciones sobre los atletas que se retiraron» de la competición.
«Con los resultados de la investigación, la Comisión de Disciplina tomará las sanciones apropiadas», añade el comunicado. La Federación Rusa de Atletismo precisó haber recomendado este domingo a la RUSADA que vigile especialmente las competiciones juveniles y las regionales.
Contada por la AFP, la RUSADA precisó por su parte que «retirarse antes de una competición no supone una violación de las reglas antidopaje» pero que «un hecho así suscita el interés de los responsables de los controles (antidopaje) para establecer planes de controles dirigidos, así como el del departamento de investigación de la RUSADA».
La RUSADA fue suspendida por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) en noviembre de 2015, cuando estalló el escándalo que llevó a la revelación de un sistema de dopaje que implica a numerosos estamentos del Estado Ruso, desde el Ministerio de Deportes a los servicios secretos, durante 2011 y 2015.
En junio, la agencia rusa fue de nuevo autorizada a realizar sus propios programas de controles antidopaje.