El velocista surinamés Issam Asinga, que sorprendió al mundo atletico cuando irrumpió en 2023 quebrando el récord mundial sub-20 de 100 metros, con un registro 09.89 con 18 años; recibió una suspensión por dopaje positivo al modulador metabólico tras argumentar que lo ingirió mediante unas gominolas y estará suspendido hasta 2027.
La sustancia está catalogada como altamente perjudicial y cancerígena y tiene un efecto que podría ser similar al de la EPO (eritropoyetina) tan popular en los deportes de resistencia a partir de los años 90. El ciclista Valery Kaikov, pillado en 2013, fue el primer cazado con este metabolito.
Con la suspensión, todos los resultados de Asinga desde el 18 de julio serán anulados, incluyendo sus medallas de oro en los Campeonatos Sudamericanos y su récord mundial sub-20 de 100 metros. Asinga planea apelar la sanción ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en Suiza.
A sus 19 años, el futuro de Asinga en el atletismo queda interrumpido.