Por: Rubén Aguilera.- Cuando la realización de los Juegos Olímpicos de Tokio pende de un hilo y a mi entender deberían ser al menos postergados, es interesante saber que en la antigüedad con una historia que abarca catorce siglos y doscientos noventa y una ediciones nunca dejaron de hacerse. La famosa tregua sagrada ponía límite a las guerras para participar en Olimpia en las competencias programadas.
En la era moderna que se inicia en 1896 en Atenas los Juegos no se realizaron en 1916, 1940 y 1944. Siempre las causas fueron las guerras.
Los Juegos de 1916 estaban programados en Berlín. La capital alemana había sido designada el 4 de julio de 1912 en una sesión del COI celebrada en Estocolmo.
En ese mismo año se inició en Berlín la construcción del estadio olímpico el que fue inaugurado el 8 de junio de 1913. Lamentablemente la primera guerra mundial que comenzó el 28 de julio de 1914 impediría la gran justa universal e incluso una semana de deportes de invierno que se pretendía realizar.
Finalmente este país sería sede de los Juegos de verano de 1936 en Berlin luego de obtener la sede en 1931 postergando a Barcelona y de invierno en Garmisch Partenkirchen.
Precisamente en Berlin el 31 de julio de 1936 se otorgó la sede de los Juegos de 1940 a Tokio quien logró 36 votos contra 27 de Helsinki. Sin embargo un año después el 7 de julio de 1937 se inicia la guerra chino japonesa imposibilitando a la capital del sol naciente organizarlos. Japón renuncio a efectuarlos en julio de 1938, incluyendo a los de invierno en Sapporo.
El COI designó entonces a Helsinki y a Saint Moritz como sedes sustitutas. Esta última declinó finalmente y se decidió por Garmisch Partenkirchen que había sido sede de 1936 y mantenía todas las instalaciones en uso. El inicio de la II Guerra mundial dejará sin efectos ambos Juegos.
En la sesión del COI de Londres en 1939 se concedió a la capital inglesa la organización de los Juegos de 1944. En la votación derrotó con 20 votos a Roma 11, Detroit 2 y Lausana 1. Para los Juegos de invierno Cortina dÁmpezzo superó con 16 votos a Montreal 12 y Oslo 2. De más está decir que no se realizaron. Londres y Saint Moritz serían las sedes de los siguientes Juegos que se desarrollaron en 1948.
Además es interesante destacar que los juegos de 1908 en principio debieron realizarse en Roma. Al parecer la erupción del Monte Vesubio del 7 de abril de 1907 fue la causante de que el COI trasladara la sede a Londres. Pese a esto no hay documentación oficial que indique las causas. El barón Pierre de Coubertin en sus “Memorias olímpicas” habla de “silencio prudente” y Otto Mayer, quien fue canciller del COI, en su libro “A través de los aros olímpicos lo expone abiertamente“ No poseemos ninguna indicación sobre las razones del traslado a Londres de los Juegos Olímpicos previstos para Roma”.
Un poco de historia para resistir estos días de incertidumbre que va mucho más allá de lo que suceda con los Juegos Olímpicos del 2020.