La publicación de las acusaciones sobre Justin Gatlin ya cobró su primera víctima. Justin Gatlin, que deberá volver a luchar por limpiar su imagen, reaccionó de inmediato ante la sombra que han vertido sobre su entrenador y su agente despidiendo a Dennis Mitchell, su entrenador y quien habría aceptado ofrecer información al diario sobre cómo obtener testosterona y hormonas de crecimiento, productos prohibidos en el mundo del deporte.
“Me ha chocado mucho enterarme de que mi entrenador puede haber hecho una cosa así. Le he despedido de inmediato en cuanto me he enterado”, ha contado Gatlin en las redes sociales. El estadounidense se ve obligado de nuevo a defenderse de otro escándalo relacionado con el dopaje tras su turbio pasado. “He puesto sobre la mesa todas las opciones legales para impedir que nadie pueda mentir sobre mí de esta forma. Pronto tendrán noticias que les ofrecerá mi abogado”, ha declarado Gatlin.
La conversación entre Mitchell y el agente de Gatlin, Robert Wagner, recogida por ‘Telegraph’, tampoco pasó desapercibida para la Federación Internacional. Sebastián Coe, presidente de la IAAF, se mostró muy contrariado por las informaciones. “Las acusaciones son extremadamente graves”, ha contado, a la espera de conocer en qué queda la situación del campeón del mundo.
