En la prueba de los 1,500 metros, de la Liga de Diamante de Estocolmo, Jakob Ingebrigtsen (3:30.74), la gran estrella del atletismo europeo, fue vencido por el keniata Timothy Cheruiyot (3:30.25). Y eso que el menor de los hermanos Ingebrigtsen, a diferencia de lo ocurrido el pasado 14 de agosto en Mónaco, no dejó escaparse desde la partida al corredor keniata.
De hecho, al igual que ocurrió en la capital monegasca, Ingebrigtsen y Cheruiyot llegaron igualados a la recta final, donde, como ya ocurrió en el estadio Luis II de Mónaco, el keniata no ha dado ninguna opción a su rival.
Cheruiyot impuso una marca de 3:30.25 y el noruego registró los 3:30.74, sin poder acercarse al récord de Europa (3:28.68), que él mismo estableció hace nueve días en Mónaco.
