La Federación Internacional de Atletismo (World Athletics) anunció un cambio en su normativa de zapatillas, aprovechando que el aplazamiento de los Juegos Olímpicos de Tokio le permite tener más margen para controlar la guerra tecnológica de la industria por producir un calzado que permite marcas cada vez más rápidas.
Pero si la normativa del pasado 31 de enero se centraba sobre todo en el calzado de ruta, que limitaba a una altura de la suela de 40 milímetros, lo justo para las polémicas Nike Vaporfly, esta vez el objeto de cambio es el calzado de pista.
Si la altura máxima para las zapatillas con clavos se establecía en 30 milímetros, ahora es más restrictivo: 25 milímetros de altura máxima para todas las pruebas de mediofondo y fondo desde los 800 metros y para el cross y 20 milímetros para todas las pruebas de velocidad y vallas. En saltos y lanzamientos también establece en esos 2 centímetros el límite exceptuando el triple salto, donde lo eleva a 25 y deja algo claro: «la suela en el centro del antepié del atleta no debe ser más alta que en el centro del talón».
Nuevas alturas máximas de las suelas de zapatillas de atletismo
Saltos y lanzamientos (excepto triple): 20mm
Triple salto: 25mm
Velocidad y vallas: 20mm
Mediofondo y fondo (desde 800m): 25mm
Cross: 25mm
Ruta y marcha: 40mm
Pruebas de montaña y trail: cualquier espesor
Obligación de presentar las nuevas zapatillas para validar
La nueva normativa elimina la obligación de que las zapatillas deban llevar al menos cuatro meses en el mercado para que las marcas que se consigan con ellas pueden ser validadas. A cambio se dice que cualquier calzado que haya salido después del 31 de enero y que se hubiese validado por World Athletics antes del 15 de julio puede ser usado inmediatamente. Desde esa fecha, cualquier atleta que quiera llevar una nueva zapatilla en una competición internacional, debe mandar las especificaciones (tamaño, dimensiones, altura, estructura de placas) e informar de si está personalizada de alguna forma. A partir de ahí, World Athletics podría pedir un modelo al fabricante para examinarlo físicamente en 30 días si es posible y confirmar si cumplen con la regla 5.15.