Según un estudio universitario que recoge información desde 1960 hasta 1980, más de 30 atletas de alto nivel de Alemania Occidental, confesaron que en su época de deportistas utilizaron anabólicos y diferentes tipos de sustancias que, al día de hoy, están totalmente prohibidas en el atletismo y en el deporte en general. Esta investigación también nos revela nombres de entrenadores, médicos y farmacéuticos que estuvieron involucrados en estos actos antideportivos.
Las sustancias más utilizadas fueron Dianabol y Stromba, a las que se accedía mediante prescripción médica y que estaban financiadas por el seguro médico. «Fue asombroso que los atletas lo hicieran todo de una manera tan abierta», comentó Krivec, farmacéutico de la Universidad de Hamburgo.
En su disertación, Krivec se puso en contacto con 121 exatletas masculinos de alto nivel que compitieron por Alemania Occidental, de los que respondieron 61. De ellos, 31 admitieron el abuso de sustancias como los esteroides, que fueron prohibidos a partir de 1970. En el informe también se recoge que médicos, farmacéuticos, entrenadores y otras personas estuvieron involucradas en esta trama de dopaje.
Pese a que se había asegurado el anonimato de la investigación, el ex lanzador de disco Klaus-Peter Hennig aceptó la publicación de su nombre. «Así es exactamente como lo recuerdo, como lo viví entonces y como yo mismo lo he hecho», explicó Hennig, que participó en los Juegos Olímpicos de 1968 y 1972.
