Por Eddy Luis Nápoles Cardoso
La segunda fecha del mundial de Berlín, sirvió para que una vez más el jamaicano Usain Bolt pusiera en ridículo a los seres humanos y es que para serles sincero, esperaba un nuevo récord de Bolt, pero no a tal extremo, ha sido borrada de los libros una marca que parecía de ensueño, el 9.69 que el mismo implantó en los pasados Juegos Olímpicos de Beijing y nada más y nada menos que por 11 centésimas de segundos, nada, que con el 9.58 estampado ahora en el estadio Olímpico de la capital alemana no soñaba en este planeta nadie, es el mayor alón que recibe esta disciplina desde que en 1968 el estadounidense Jim Hines inaugurara la era del cronometraje electrónico, con aquel mítico 9.95, otro descenso significativo era el logrado por Maurice Greene, que rebajó el tope en cinco centésimas, durante la cita de Sevila en 1999, Greene corrió los 100 metro planos en esa ocasión en 9.79 para borrar el 9.84 del canadiense Donovan Bailey.
Desde que se iniciaron las series eliminatorias de los 100 metros, se vio al bólido caribeño con una seguridad pasmosa y un temperamento poco común en esta disciplina, aun cuando en la presente temporada había encajado una
derrota frente al otro favorito de los entendidos, el estadounidense Tyson Gay, más al llegar el momento cumbre del año, una vez más, Bolt demuestra ser un atleta fuera de serie, hoy lo vi igual que en la cita olímpica, seguro de la victoria y con su intranquilidad acostumbrada, antes y después de la carrera y aun teniendo a su lado a un señor adversario como Tyson Gay, que de hecho realizó la tercera mejor marca de todos los tiempos con ese 9.71, pero ante el brillo del sensacional fenómeno jamaicano ha quedado empequeñecido.
Hoy ya las pruebas de velocidad con la presencia de este corredor, más que una atracción, constituyen para el resto de los velocistas una mera participación, pues Bolt va teniendo como único rival sus propias marcas.
Indudablemente se ha producido la mejor carrera de 100 metros de la historia, donde cinco corredores lograron cronos inferiores a los 10 segundos y otros dos con esa misma cuota, mientras el ocupante del octavo lugar, parecía con más deseos de ver el espectáculo desde las gradas, que correrlo.
Una vez más el Caribe domina la prueba reina, logrando ubicar en la final a cinco atletas, con dos preseas, una de oro, una de bronce, mientras los tres restantes se ubicaron en cuarto, quinto y séptimo lugares respectivamente.
