Un año de muchos éxitos, fue para la marchista peruana Kimberly García que cerró su magnífico 2022 con una nominación a la mejor deportista del año que realizó World Athletics. La bicampeona mundial estuvo entre las cinco mejores atletas del planeta, donde la norteamericana Sydney McLaughin fue elegida como la mejor del 2022.
García, en un hecho sin precedente e histórico para el deporte peruano, se coronó por partida doble el titulo mundial en la marcha atlética donde logró la medalla dorada en los 20km y 35km marcha atlética.
Su grandiosa actuación la llevo a ser nominada entre las mejores atletas del mundo y estuvo presente en Montecarlo y se codeó con las grandes personalidades del atletismo mundial, como la jamaiquina Shelly-Ann Fraser-Pryce (100 metros), la venezolana Yulimar Rojas (salto triple), la nigeriana Tobi Amusan (100 vallas) y la ganadora Sydney McLaughlin (400 vallas).
A pesar de haber llegado a lo más alto en un torneo mundial, Kimberly García no recibe el apoyo necesario para continuar su preparación. Sin el soporte económico e incondicional de su familia, Perú no tendría dos medallas mundiales en marcha atlética. “Agradezco muchísimo a mi familia porque ellos han apostado por mí. Otros, tal vez, me hubieran dicho mejor dedícate a estudiar, porque es lo típico que dicen muchas. Sin embargo, mi familia siempre me ha apoyado. Incluso cuando ya había logrado ganar en campeonatos sudamericanos y panamericanos, y no había apoyo de las empresas privadas y en el IPD todo era muy reducido”, señaló.
El sueño olímpico de Kimberly García es gracias al apoyo de las empresas privadas y siente que lo que brinda el estado es insuficiente para que un deportista pueda destacar. “A veces el estado, el IPD esperan que uno sea campeón, pero es muy difícil sin el apoyo y esto se suma a que en algunos casos ni la familia apoya al deportista. Hay mucho talento que se echa a perder y eso debería cambiar”, dijo la atleta. “Agradezco a las empresas privadas que se han sumado en este sueño olímpico. Del estado no espero mucho la verdad y debería ser al revés. El estado te debería dar esa estabilidad y las empresas privadas ser un complemento”, agrega.
Ahora, sus principales objetivos son el Mundial de atletismo en Budapest y los Panamericanos de Santiago 2023, el camino que la llevará a buscar una medalla en París 2024.