La fondista mexicana Madaí Pérez, con 35 años de edad, cumplirá en Brasil con su segunda cita en unos Juegos Olímpicos, y lo hará con la mente puesta en lo más alto del podio del maratón femenil, su especialidad y donde destacó a lo largo de más de 15 años de carrera como atleta, además, buscará redimirse después de perderse los Juegos Olímpicos de Londres, debido a una lesión.
La corredora azteca estuvo cerca de perderse la justa veraniega en Río luego de sufrir una fibrosis en el tendón de Aquiles del pie izquierdo, la cual la mantuvo fuera de actividad durante casi dos años, después del Campeonato Mundial de Moscú en 2013.
Pero la determinación y el tratamiento médico al que se sometió, donde se incluyó una cirugía, la llevaron a competir en el Maratón de Hamburgo, donde su marca de 2 horas, 29 minutos y 27 segundos la llevaron a obtener el quinto puesto y el pase directo a la justa olímpica.
La vida de Pérez Carrillo es correr las distancias largas y durante su carrera hecho una digna representación de nuestro país en cada competencia de prestigio en la que ha participado, pero el gran triunfo se le ha negado, por lo que una preparación inteligente y cuidado con miras a los Juegos en Río se ha convertido en su punto de enfoque desde que obtuvo el boleto.
“Calificar a Río ya es una meta cumplida y ahora me pongo una meta más grande, no puedo hablar en este momento de un lugar, pero sí de hacer lo mejor posible de poner en alto a mi país como siempre lo he hecho”, declararía después de haber conseguido su pase.
Sin signos de la lesión que la mantuvo en muletas durante dos meses después de su cirugía en diciembre de 2015, la medallista de plata en el maratón de los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 busca a toda costa mejorar su único resultado en Juegos Olímpicos, un decimonoveno lugar en la justa de Beijing, hace ya lejanos ocho años.
